La vinculación entre la academia y el sector privado es fundamental para detectar las principales necesidades del mundo profesional y generar así soluciones desde las aulas. Por ello, la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTM) se ha vinculado fuertemente con el sector empresarial y gubernamental bajo el objetivo de crear programas que respondan a las demandas de las empresas.

En conjunto con la Secretaría de Desarrollo Económico, esta nueva institución de educación superior generará mesas de trabajo con líderes del sector público y privado. A lo largo de varias sesiones, los participantes determinarán la viabilidad de sus carreras mediante ejercicios de pertinencia y factibilidad basados en las demandas del sector productivo.

Jorge Guillén Muñoz, rector de la UTM, reconoció la participación multisectorial en la formulación de sus programas que entrarán en vigor a partir del próximo semestre. Refirió que todos buscarán atender temas como sustentabilidad, bilingüismo, internacionalización y una vinculación formal con el sector privado a través del modelo de formación dual.

Detalló que algunas de las carreras que vienen en puerta son Negocios Internacionales y Operaciones Comerciales, Procesos de Producción para la Calidad en las Empresas, Desarrollo de Software, entre otras. Estas disciplinas, afirmó, promoverán el uso y dominio de nuevas tecnologías y una constante actualización por parte de profesores y estudiantes.

En medio de la cuarta revolución industrial, la UTM formará talento de acuerdo a  las tendencias globales con el objeto de que las oportunidades laborales de sus alumnos sean mayores. El 70% de los docentes de la institución cuentan con maestría y doctorado, con experiencia en la industria y con habilidades en inglés.

La universidad se conduce por el modelo BIS que también comparte la Universidad Tecnológica El Retoño (UTR). Este consiste en un sistema de enseñanza que promueve la educación bilingüe, internacional y sustentable.

Su ubicación será estratégica, al situarse en la colonia Villas de Nuestra Señora de la Asunción, una zona vulnerable donde la educación podrá marcar un parteaguas para el despegue profesional de sus jóvenes. La institución ya arrancó operaciones pero se alojará en el nuevo campus a partir del mes de septiembre.