Un molinillo manual, pequeños tambos de lámina y una gran motivación, fueron las herramientas con las que Juan Manuel Morales Pedroza inició lo que en un principio era una pequeña productora de quesos, 45 años después su empresa da empleo a más de 65 colaboradores hidrocálidos.
Mientras aún estudiaba la carrera de médico veterinario zootecnista en la Universidad Autónoma de Aguascalientes, Juan Manuel comenzó vendiendo sus productos en tiendas de abarrotes, poco a poco con el apoyo de su hermana y esposa comenzó a escalar y a distribuir a otros estados.
Fue hasta 1991 cuando la empresa se constituyó bajo el nombre de Lácteos Industrializados de Jesús María, S.A. de C.V., cambiando su matriz a ese municipio y llegando a ser reconocida como Lácteos Chacho, nombre que hace referencia al sobrenombre de su fundador.
Con un crecimiento anual de aproximadamente 12%, el principal mercado de Vivelat y el que les ha dado un mayor empuje es el del queso destinado para pizza, pero también cuentan con otros tipos de producto como el queso asadero, chihuahua, gouda, manchego, requesón, panela, prensado y de bola, estos dos últimos siguen conservando su tradicional proceso manual.
Principalmente, Vivelat distribuye por toda la región Centro-Bajío-Occidente, pero también tiene presencia en ciudades como Monterrey y Ciudad de México. Con su naturaleza emprendedora y con el empeño de siempre seguir mejorando, actualmente la empresa conserva sus buenas prácticas en cuanto a inocuidad y está en proceso de certificación para en un futuro cercano comenzar a exportar hacia Estados Unidos.

Ese objetivo abrirá un nuevo abanico de oportunidades no sólo para la compañía sino para sus colaboradores, los cuales crecen y mejoran junto a Vivelat pues, según Juan Manuel, ellos son uno de los mayores orgullo de la compañía:
“El mayor éxito es que bastantes familias se han visto beneficiadas y han contribuido a nuestro crecimiento, tenemos cinco personas que tienen con nosotros entre 25 y 30 años, ese es un logro muy importante para mí, principalmente en este negocio en el que uno nunca deja de aprender”, concluye Juan Manuel.